Cuando Groenlandia, durante la IIGM, abasteció a los Aliados del mineral necesario para construir aviones

La ‘criolita’ es
un mineral del que se obtiene el óxido de aluminio con el que se puede producir
aluminio. El mayor yacimiento del planeta se encuentra en la población de Ivittuut (al sur de Groenlandia) y a lo largo de un siglo y
medio se extrajo millones de toneladas.
Desde 1987, la que fue una próspera ciudad minera de la isla nórdica, se
encuentra abandonada, siendo una población fantasma que se ha convertido en
destino turístico de numerosos viajeros.

La razón del mencionado abandono de Ivittuut fue el hecho de
resultar poco rentable la explotación minera, al sintetizarse el mineral y
poderse obtener mucho más fácil (y económicamente) el aluminio.

Pero su mayor esplendor lo vivió a partir de 1940 cuando el
gobierno de Estados Unidos decidió
instalar en Groenlandia varias bases militares
con el fin de defender toda
aquella zona de la presencia de submarinos alemanes, durante la Segunda Guerra Mundial.

A pesar de que EEUU no participaba en aquellos momentos en
el conflicto bélico, sí que se involucró en la defensa de la isla, por su
situación estratégica. Groenlandia ha sido una de las grandes aspiraciones de numerosos
mandatarios estadounidenses que han pretendido comprársela a los daneses (el
último de ellos Donald Trump, en 2019).

Además de la estratégica situación de Groenlandia en el
mapa, a los estadounidenses les interesó instalar sus bases en la isla para
poder explotar el mayor yacimiento de criolita, en todo el planeta, con el que
podía obtener el mineral con el que se
producirían millones de toneladas de aluminio que iría destinado a sus fábricas
de armamento
.

EEUU abasteció durante los primeros años de la IIGM a países
como el Reino Unido de aviones y armamento, y la mayoría del aluminio usado
para ello provenía de la mina en Ivittuut.

Miles llegaron a ser los estadounidenses enviados a
Groenlandia para ocuparse de las diferentes bases, además de la extracción de criolita,
sobre todo a partir de la entrada en la guerra de Estados Unidos, debido a que
la necesidad de producir aluminio se multiplicó.

En 1946, tras finalizar el conflicto bélico, el presidente Harry
S. Truman volvió a insistir en el interés estadounidense en comprar Groenlandia,
ofreciendo a Dinamarca cien millones de dólares de la época (al cambio,
actualmente rondarían los mil quintetos millones de euros). El gobierno danés
rechazó la oferta, pero permitió a los norteamericanos continuar explotando los
recursos de la isla y seguir en ella durante los años de la Guerra Fría con las
bases militares.

En 1959 se puso en marcha el ‘Proyecto Iceworm’, con el que EEUU construyó una ciudad
subterránea, además de experimentar en la isla con su programa nuclear.

A partir de 1987, la
extracción de criolita ya no fue rentable
, quedando abandonadas las minas
de Ivittuut y con ello también la que había sido una próspera ciudad groenlandesa.
Actualmente algunos de los edificios de esta población fantasma que se han convertido en hoteles para turistas
que viajan allí en verano.

Fuentes de consulta e imagen: arsukfjorden / elmundo
/ smithsonianmag
/ Wikimedia
commons

Más historias que te pueden interesar: