Cuando Charles Dickens frustró la compra de la casa natal de Shakespeare por el empresario circense PT Barnum

Stratford-upon-Avon es
una población situada en el centro de Inglaterra por la que anualmente pasan alrededor
de tres millones de turistas ¿el motivo?: en Henley Street está situada la casa natal de William Shakespeare, el más ilustre de los escritores de lengua
inglesa.

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Este hecho convierte a esta pequeña ciudad en uno de los
puntos más visitados del Reino Unido y que más dinero genera gracia a el alud
de visitantes. Algo que estuvo a punto de no ser posible si se hubiese llevado
a cabo a mediados de la década de 1840 la estrafalaria idea del famoso Phineas Taylor Barnum.

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El estadounidense Barnum en aquella época se había
convertido en un próspero y multimillonario empresario circense. Su gira por
Europa con el circo que regentaba le reportó grandes ganancias y frecuentes
eran los gestos de soberbia que tenía al querer adquirir todo aquello que le
gustaba. Cuando se encaprichaba de algo no cejaba en el empeño hasta
conseguirlo, fuere cual fuese su precio. Si lo quería lo compraba y punto.  

Y esto mismo le ocurrió durante su gira por Inglaterra,
donde actuó su circo actuó para la mismísima reina Victoria. Durante una de las
excursiones para visitar el país fue llevado a Stratford-upon-Avon (alrededor
de 1846) y al ver la casa natal del
ilustre dramaturgo
tuvo una brillante idea (para él): iba a adquirir el
caserón y posteriormente hacer que lo llevasen piedra por piedra hasta Estados
Unidos donde mandaría construir de nuevo la casa en unos terrenos de su
propiedad en Nueva York, convirtiéndola en la atracción principal de su museo de curiosidades.

Los planes del empresario con la casa natal de Shakespeare llegaron
a oídos de varios intelectuales británicos de la época que pusieron el grito en
el cielo y decidieron constituir una comisión que abogase por salvaguardar el
lugar de nacimiento del genial dramaturgo inglés.

Uno de los personajes más activos en la ‘Shakespeare Birthplace Trust’ (modo en que se bautizó a dicha
comisión) fue el escritor Charles
Dickens
quien movió cielo y tierra para conseguir que el Parlamento de
Inglaterra dictase una ley que protegiese el patrimonio nacional ante la
agresión económica de los multimillonarios extranjeros.

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La compra debía realizarse a través de una subasta y en
aquellos momentos quien tenía la intención de ofrecer la puja más alta por el
inmueble era el multimillonario PT
Barnum
, para que retirase su oferta de adquisición la solución era pujar
con una cantidad superior a la que hiciese el empresario circense, pero éste no
parecía conformarse y pensaba ir pujando hasta conseguir su propósito.

Se habían organizado una serie de representaciones y actos
culturales en la propia casa de Shakespeare coordinados por Charles Dickens
pero la recaudación no había sido suficiente.

Solo quedaba otra posible solución al problema, ponerse de
acuerdo con el subastador para que éste comunicara a Barnum que habían
realizado una puja muy por encima de la suya (aunque fuese mentira). La puja
estaba en 1.500 guineas (moneda inglesa de la época) y se comunicó al
empresario estadounidense que la comisión encabezada por Charles Dickens había
subido la puja hasta las 3.000 guineas (un precio desorbitante).

Esta artimaña dio buen resultado y PT Barnum retiró su puja,
por lo que la venta de la casa al estadounidense no se hizo posible y fue
adquirida por la Shakespeare Birthplace Trust (hoy en día todavía sigue bajo su
propiedad y custodia).

Cabe destacar que vinculada a esta historia suele explicarse
una leyenda urbana que indica que para convencer a Barnum que abandonase su
empeño de comprar la casa de Shakespeare le ofrecieron adquirir un elefante africano
del zoológico de Londres bautizado como Jumbo.

Si bien es cierto que compró dicho paquidermo para su circo,
no fue por ese motivo ni en esa época, sino tres décadas después (en 1882).

Por cierto, el mediador en la venta del elefante fue Charles Jamrach, de quien os hablé días
atrás en el post: El hombre que con sus
propias manos luchó con un tigre de bengala para arrebatarle a un niño que
llevaba entre sus colmillos

Otro dato curioso a destacar es que en 1868 el circo de PT
Barnum en Nueva York sufrió un incendio, quedando destruido por completo junto
al museo (de haber conseguido comprar la casa natal de William Shakespeare esta
también hubiese sido pasto de las llamas).

Cabe destacar que en 2017 se estrenó una película musical
titulada “El gran showman” basada en
la vida de Phineas Taylor Barnum (algo tergiversada y edulcorada) que fue protagonizada
por Hugh Jackman.

Fuentes de consulta e imagen: shakespeare.org.uk
/  theguardian
/ elpais
/ Wikimedia
commons