El reverendo gay que creó en San Francisco una patrulla callejera para defender al colectivo LGBT de las agresiones homófobas
Los historiadores no terminan de ponerse de acuerdo sobre el momento concreto en el que la ciudad de San Francisco se convirtió en el destino de miles de personas homosexuales y una de las más prominentes comunidades LGBT del planeta, aunque un gran número de expertos apunta que fue a partir de mediados de la década de 1940, momento en el que se expulsó del ejército a los soldados gais (estaba prohibida la homosexualidad dentro de las Fuerzas Armadas) que se encontraban en campamentos militares cercanos de esta importante población de la costa Oeste de los Estados Unidos.
El momento de eclosión fue a inicios de 1970, pero al igual que la ciudad iba albergando cada vez más homosexuales también las agresiones que sufrían iban en aumento, motivo por el que empezaron a organizarse en grupos en defensa de los colectivos y derechos LGBT, muchos de ellos de carácter político, otros sociales e incluso una curiosa y violenta patrulla callejera, llamada ‘Lavender Panthers’ (Panteras Lavanda), que fue creada por el reverendo evangelista pentecostal Raymond Broshears, quien se había declarado abiertamente homosexual desde temprana edad y que quería defender a los gais, lesbianas y personas trans de los continuos ataques homófobos que padecían.
El 4 de julio de 1973, Raymond Broshears fue atacado en la calle por un numeroso grupo de adolescentes, quienes lo patearon y golpearon hasta dejarlo inconsciente en el suelo y al borde de la muerte. Mientras se recuperaba de las heridas (algunas de ellas le dejaron secuelas para el resto de su vida), el reverendo empezó a gestar una idea que sabía que provocaría mucha controversia: repeler la violencia con violencia.
Todo el apostolado y diálogo que había estado haciendo, desde que llegó a San Francisco ocho años antes, ya no servía. Había invertido cientos de horas en tratar de hacer pedagogía con los vecinos de Tenderloin (el barrio marginal en el que vivía y trabajaba), pero de poco estaba sirviendo, en vista a los numerosos ataques que padecían las personas homosexuales y que aquella ocasión había sufrido en sus propias carnes.
Cada vez que se había denunciado alguna agresión a alguna persona homosexual la policía había mirado hacia otro lado y la inmensa mayoría de ocasiones los responsables salían indemnes.
Por tal motivo, Broshears se propuso crear un grupo que denominaría ‘Lavender Panthers’ (inspirado en los ‘Panteras Negras’, que defendían con métodos violentos a los ciudadanos afroamericanos). Tal y como fue dado de alta reunió a una veintena de voluntarios y los formó en artes marciales como el Kung Fu (muy de moda en la época gracias a la serie de televisión protagonizada por David Carradine), judo, karate y la lucha callejera con el cuerpo a cuerpo o utilizando armas de defensa.
Tras ser dado de alta del hospital, el reverendo convocó una rueda de prensa donde, portando una escopeta del calibre 410 en sus manos, anunció la creación de la patrulla callejera Lavender Panthers, la cual se encargaría de velar por la seguridad de las personas del colectivo LGBT, sometidas a continuas agresiones en las calles de San Francisco, repeliendo los ataques con violencia si era necesario.
Una decisión que, tal y como ya había previsto, creó un gran revuelo y numerosas críticas, no solo por parte de ciudadanos sanfranciscanos e incluso del propio colectivo homosexual, quienes se oponían a ser defendido por matones callejeros.
Curiosamente, en el poco menos de un año que los ‘Lavender Panthers’ se mantuvieron activos (hasta la primavera de 1974) no hay constancia de graves incidentes en los que sus miembros participaran y muy probablemente la presencia de estos, patrullando por las calles de San Francisco, disuadió a los homófobos a realizar sus ataques.
Durante aquellos meses parte de la prensa sacó alguna noticia relacionada con el reverendo Raymond Broshears y su patrulla callejera.
Fuentes de consulta e imagen: Newsweek / Time / hornet / Online Archive of California / Hemeroteca San Francisco Examiner
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