La joven que aparecía en los billetes de cinco pesos mexicanos y las múltiples leyendas urbanas

Conocemos como ‘leyenda
urbana’
a aquellos relatos que se van contando sobre algún supuesto hecho y
en el que la mayor parte de la información
es falsa (sino toda) o está tergiversada
. Una de las características de ese
tipo de historias es que se van
modificando según se va explicando
(de una persona a otra, de una
generación a la siguiente), encontrándonos que al cabo de un tiempo, nada tiene
que ver lo relatado inicialmente con lo que se acaba explicando.

Entre las docenas de miles de leyendas urbanas que circulan
desde hace siglos, esto es lo que ha sucedido con uno de los relatos más famosos que se explican en México (y que hoy
en día se ha expandido a todo el planeta y se encuentra en varios idiomas,
gracias a las redes sociales e internet) es el que tiene relación con el personaje que aparece en el primer
billete de cinco pesos mexicanos impreso en 1925
.

En dicho billete salía el
rostro de una joven y desconocida mujer
a la que con el tiempo se la empezó
a denominar como ‘la gitana’,
quedando ese nombre para llamar a ese papel moneda a lo largo de las siguientes
cinco décadas (hasta que fue retirado de circulación en 1978).

El misterio sobre quién era la enigmática mujer y qué
relación tenía con la historia de México
es lo que propició al nacimiento de infinidad de hipótesis y conjeturas sobre
la misma, creándose una leyenda urbana que algunas personas explican como si
fuese un relato histórico y en el que el 99 por ciento de los datos explicados
son falsos y/o totalmente tergiversados.

La Revolución
mexicana
fue un conflicto que tuvo lugar entre 1910 y 1920, siendo el
primer presidente posrevolucionario del país Álvaro Obregón, quien nombró en 1923 a Alberto J. Pani como Secretario de Hacienda y Crédito Público (el
equivalente a Ministro de Finanzas), con quien ya había contado en los años
anteriores para ser responsable de la Secretaría de Relaciones Exteriores de
México.

Tras el mandato de Álvaro Obregón (en 1924) su sucesor, Plutarco Elías Calles, quiso seguir
contando con Alberto J. Pani al
frente de las finanzas del país, realizándole el encargo de crear el primer Banco nacional de México y de
ponerse al frente de la emisión de las
nuevas monedas y billetes de curso legal del país
.

Para ello, Alberto J. Pani entabló estrechas relaciones de colaboración
con la ‘American Bank Note Company’
(ABNC)
, una importantísima compañía estadounidense fundada en 1795 y que a
lo largo de más de un siglo se había encargado
de elaborar divisas tanto para Estados Unidos como para un buen número de
países
que, en aquellos momentos, no disponían de dicho sistema.

El Secretario de Hacienda Pani viajó hasta Nueva York en
1925 con el fin de tratar el asunto y cerrar un acuerdo y meses después de su
viaje se puso en circulación una serie de billetes de varios valores (5, 10,
20, 50, 100, 500 y 1.000 pesos) en los que no
aparecían personajes populares de la historia de México
, sino que se optó
por escoger imágenes y representaciones del catálogo que la propia ABNC tenía
disponibles.

La única referencia a México estaba el reverso de todos los
billetes en el que aparecía representado el
famoso monumento del ‘Ángel de la independencia’
(ubicado en la el Paseo de
la Reforma de la capital mexicana e inaugurado en 1910). En el anverso de los
billetes se podía encontrar las siguientes representaciones: la Diosa Fortuna
(de la mitología romana) en los billetes de mil pesos; una figura alegórica que
simbolizaba la energía eléctrica en los de quinientos; una figura alegórica
simbolizando el comercio marítimo en los de cien; una figura alegórica
simbolizando la navegación en los de cincuenta; una escena de un puerto con un
barco y una locomotora en los de veinte; la imagen de dos ninfas aladas
sosteniendo ‘el libro de la Ley’ en los de diez; y una joven desconocida y
misteriosa con aspecto de gitana en los de cinco.

Hasta aquí, todo lo relatado es cierto y se ajusta a los
documentos y crónicas oficiales. Fue a partir de la emisión y puesta en
circulación de los mencionados billetes cuando empezó a surgir todo tipo de
historias y leyendas urbanas (a cual más descabellada o inverosímil) alrededor
de la identidad de la desconocida joven protagonista
de los billetes de cinco pesos mexicanos
.

La mayoría de esos relatos (totalmente apócrifos y sin
ningún documento oficial o histórico que lo avalen) señalan que quien aparece
en el anverso de esos billetes de 5 pesos se trataba de la amante de Alberto J. Pani y a partir de ahí, cada relato explica
una historia diferente sobre la identidad de la joven y los motivos por los que
el Secretario de Hacienda ordenó que se colocara la imagen de su querida allí.

Unos relatos dicen que se trataba de una prostituta que
conoció en el tren que llevó a Pani desde la capital de México hasta Nueva
York. Esas historias se adornan con escabrosos detalles como que en la ciudad estadounidense
fueron arrestados junto a otras personas por estar involucrados en un asunto de
los que por aquel entonces se llamaba ‘trata
de blancas’
.

En el afán de algunas personas en adornar todavía más esa
leyenda urbana, llena de datos falsos, surgió de la nada el supuesto nombre de
la joven a la que, sin motivo alguno se la bautizó como ‘Gloria Faule’ y añadiendo que se trataba de una actriz de origen catalán que había llegado
a México
unos años antes con una compañía teatral española para realizar
una gira.

Después se le añadió otro personaje a esta inverosímil
historia: la hermana de la joven, otra actriz
a la que llamaban Laura
y que (según aquellos relatos apócrifos) era la
verdadera artífice de la red de prostitución y trata de blancas.

Como es habitual en este tipo de leyendas urbanas, fue
creciendo con el tiempo la cantidad de datos falsos y mentiras que se le metió
a la misma, hasta tal punto que hoy en día aparece en miles de páginas webs
(algunas de gran relevancia) e incluso en algún que otro libro sobre la
historia de México y donde se le da credibilidad a la misma, sin haberse
molestado a consultar fuentes o documentos que puedan acreditar algo de lo
explicado.

En realidad, sí que hubo en México una pareja de hermanas de
origen español que viajaron hasta allí con una compañía de teatro. Una se
llamaba Gloria (como la protagonista de la leyenda urbana) pero su hermana se
llamaba Isabel y no Laura (de hecho fue conocida en el mundo teatral mexicano
como Isabelita Fauré). El detalle en la acentuación del apellido también es
relevante.

No existe constancia alguna (ni documental ni fotográfica)
en la que se pueda relacionar al político Alberto J. Pani con la tal Gloria
Faure (o Fauré) o con su hermana, ni existe atestado alguno por parte de las
autoridades neoyorquinas (o estadounidenses) en las que se viera implicado el
Secretario de Hacienda mexicano con ningún caso de prostitución ni trata de
blancas. Tampoco aparece el nombre o apellido de las jóvenes actrices. Cero, ni
un solo documento. Todo lo que aparece en internet no tiene mucho más de un par
de décadas y son relatos que se transcribieron de la leyenda urbana que se
explicaba en México sobre la misteriosa joven (‘la gitana’) de los billetes de
5 pesos. La inmensa mayoría no son más que simples copia y pega del mismo
texto.

También cabe destacar que la American Bank Note Company aseguró
que la joven que aparecía en dicho billete pertenecía a la colección de
imágenes que esta compañía poseía y que pertenecía en realidad a un dibujo realizado
por el artista e ilustrador
estadounidense Robert Savage
(que trabajó durante la primera mitad del
siglo XX para la ABNC) y que figuraba en el archivo de imágenes con el título ‘The Ideal Head
of an Algerian Girl’
(La cabeza
ideal de una muchacha argelina), no existiendo vínculo alguno de
esta con el político mexicano e incluso que el Secretario de Hacienda no tuvo
nada que ver con la elección del retrato que debía aparecer en el anverso y
reverso de los nuevos billetes, ya que tal labor correspondió a Alberto Mascareñas Navarro, primer
director del recién creado (por aquel entonces) Banco de México.

La falsa historia de ‘la
gitana del billete de 5 pesos mexicanos’
ha llenado miles de páginas a lo
largo de nueve décadas y lo peor de todo es que la inmensa mayoría de los
ciudadanos de ese país han crecido escuchando, compartiendo y dándola como
cierta, cuando el 99 por ciento de los datos de la misma son totalmente falsos.

Fuentes de consulta e imagen: Banxico
(pdf)
/ pjsymes
/ bbc / imdb / mexicoenfotos
/ unam.mx
(pdf)
/ memoriapoliticademexico
/ aguascalientes
/ presidencia.gob.mx
/ heraldodemexico

Más historias que te pueden interesar: