Es muy típico ver en las películas o series de televisión a
un agente de policía preguntando a un testigo ocular cómo eran los rasgos del
sospechoso de un delito, mientras otro agente va dibujando en un papel aquello
que se le va describiendo (aunque hoy en día ya se realiza a través de sistemas
digitales a través de un ordenador).
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Esta técnica es conocida como ‘retrato robot’ y, aunque a lo largo de la Historia ha habido
bastantes casos en los que se hacía un retrato de un sospechoso, la primera
constancia oficial que se tiene de su utilización fue a partir del 1 de julio
de 1881 cuando, tras haberse cometido un asesinato en un tren que realizaba el
trayecto entre Londres y Brighton cuatro días antes (el 27 de junio), la
policía londinense (Scotland Yard) decidió
efectuar el retrato del sospechoso para pasárselo a todos sus agentes que
andaban en su busca y captura y publicarlo en la prensa, entre ellos el
periódico ‘The Daily Telegraph’.
La víctima era Isaac
Frederick Gold, un comerciante de monedas de 64 años que iba de
regreso a su casa y durante el recorrido fue atracado por otro viajero que
acabó pegándole un tiro y lanzando el cuerpo en un túnel. Tras el hallazgo del
cadáver las primeras pesquisas policiales llevaron a que uno de los agentes que
se encontraba de servicio el día del crimen en la estación de Preston Park recordará
que vio bajar a un extraño tipo algo nervioso y que explicó una extraña
historia sobre que había sido atacado durante el trayecto por dos hombres.
El bobbie en cuestión
era buen fisonomista, así que pudo dar con todo tipo de lujos de detalles las
características más sobresalientes sobre el semblante de aquel individuo que no
le había dado demasiada buena espina. Una de las cosas que determinaron de que
muy posiblemente sería el asesino es que éste llevaba encima varias monedas
extranjeras (concretamente de Hannover, Alemania) las mismas con las que
comercializaba la víctima.
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A través de la minuciosa
descripción que hizo el policía se pudo realizar un retrato robot del
sospechoso. Pero en aquella primera ocasión no fue un agente quien hizo el retrato
(ya que ninguno dominaba las técnicas de dibujo) sino que el encargado en hacer
aquellos trazos guiado por la descripción del policía fue uno caricaturista que
trabajaba para The Daily Telegraph.
La descripción facilitada por el agente y que posteriormente
se le añadió al anuncio de búsqueda fue la siguiente:
[…] 22 años, mediana estatura, muy delgado, con ligero
bigote, aspecto enfermizo, con arañazos en la garganta, heridas en la cabeza, sombrero
bajo de fieltro, abrigo negro, mandíbulas prominentes,
mejillas hundidas y pálidas y unos dientes muy descoloridos […]
Todos aquellos datos hicieron que rápidamente se supiera que
se trataba de la identidad de Percy Lefroy Mapleton, quien casualmente
trabajaba como periodista y que recientemente había pedido el traslado a Stepney
(un distrito al Este de Londres).
Pero una torpeza por parte del propio Mapleton fue lo que
provocó que la policía pudiera localizarlo y posteriormente detenerlo: se le
ocurrió mandar un telegrama a su jefe dándole los datos de su nuevo domicilio
para que le hiciera llegar a aquella dirección su sueldo semanal.
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policiales]
Así fue como el 8 de julio de 1881 fue detenido y
posteriormente juzgado. Un juicio en el que fue encontrado culpable y en el que
se le condenó a muerte. Como dato significativo, señalar que, mientras se
encontraba detenido a la espera de ser ejecutado, Mapleton confesó al guarda
que lo custodiaba en prisión ser el responsable de otro crimen cometido en
febrero de ese año, cuando asesinó al teniente del ejército Percy Roper, aunque poco después se
desdijo de tal confesión.
Percy Lefroy Mapleton fue ahorcado el 29 de noviembre de 1881.
Cabe destacar que la técnica de realizar retratos robots en
base a las descripciones que realizaban los testigos oculares de un delito
comenzó a utilizarse regularmente, aunque no fue una práctica generalizada en
todo el planeta hasta bien entrado el siglo XX.
Fuentes de consulta e imágenes: historybytheyard
/ murderpedia
/ archivodeinalbis
/ Wikimedia
commons
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