Encontrados bajo un aparcamiento unos restos que podrían pertenecer a Ricardo III
«¡Un caballo, un caballo, mi reino por un caballo!» es, posiblemente, una de las frases más famosas que se han pronunciado sobre un escenario de teatro. Su autor fue el incombustible William Shakespeare, quien supo ponerla magistralmente en boca de Ricardo III, el protagonista de una de sus obras más representadas, y que dedicó a uno de los reyes más infames que dio la historia de la monarquía en Inglaterra.