Se publican imágenes inéditas de la expedición del capitán Scott

«Si hubiéramos sobrevivido habría podido contar la historia, del valor, la resistencia y el coraje de mis compañeros, una historia que habría conmovido el corazón de cada inglés.»

Cabaña de la expedición del Capitán Scott en octubre de 1911

Estas fueron unas de las últimas palabras que, en 1912, Robert Falcon Scott escribió en su diario, durante la ‘Expedición Terra Nova’; aquella que debería haberlo llevado a la conquista del Polo Sur, pero el infortunio y un cúmulo de despropósitos hicieron que su competidor, el noruego Roald Amundsen alcanzase el objetivo el 14 de diciembre de 1911.

El capitán Scott y los miembros de su equipo murieron mientras regresaban tras perder la oportunidad de ser los primeros en llegar allí. Volvían tristes, agotados y con los ánimos por los suelos. Gracias al diario que fue escribiendo y a las fotografías tomadas se pudo conocer al detalle cómo fue esa durísima expedición, que estuvo desequilibrada para ambos bandos, debido a la diferente organización de los equipos.

Trineo de perros de la expedición de Scott (Foto: © 2011 Richard Kossow)

Durante la carrera hacia el Polo Sur, Amundsen hizo uso de perros de trineo y Scott empleó trineos a motor, potros siberianos y perros. La expedición del británico tuvo mala suerte y los trineos de motor se estropearon, los potros murieron y los equipos con perros no les sirvieron de mucho, por lo que Scott, junto a cuatro de sus compañeros tuvieron que terminarla a pie.

El 18 de enero de 1912, Scott y su equipo llegaron al Polo Sur, pero se encontraron con la sorpresa de que Amundsen había llegado un mes antes. El retorno al campamento base fue trágico: Scott fue perdiendo poco a poco a su equipo y finalmente él mismo pereció junto a los tres miembros restantes la noche del 29 de marzo. El cuerpo congelado de Scott se encontró a 1 milla de distancia del campamento base el 12 de noviembre de 1912.

Los potros de la expedición el 19 de noviembre de 1911 (Foto: © 2011 Richard Kossow)

Cuando el Capitán Scott escribió por última vez en su diario sabía que la muerte iría a su encuentro en breve.

Pero lo visto de la Antártida, en imágenes de aquella época, no fue todo lo que Robert Falcon Scott dejó fotografiado para la posteridad, ya que, recientemente, el arqueólogo e historiador David M. Wilson ha publicado un libro titulado «Las fotografías perdidas del capitán Scott», en la que encontramos una serie de fotografías inéditas tomadas por el propio Scott durante la expedición que realizó al Mar de Ross.

La forma en que consiguió el profesor Wilson las fotografías es de lo más curiosa, ya que, en el año 2001, se le acercó un coleccionista llamado Richard Kossow, el cual le dijo que había adquirido una colección de fotos sobre la Antártida y que estarían datadas en las primeras décadas del siglo XX.

La sorpresa vino al descubrir quién era el autor y cuándo fueron realizadas.

2 de diciembre de 1911 la expedición en marcha (Foto: © 2011 Richard Kossow)

Percance en uno de los trineos en 13 de diciembre de 1911 (Foto: © 2011 Richard Kossow)

 

Fuentes de consulta, más imágenes e info: news.yahoo.com / nytimes

Crédito de las imágenes: «Las fotografías perdidas del capitán Scott» («The Lost Photographs of Captain Scott») de David M. Wilson. Para comprar el libro podéis visitar la web hachett